Continuamos aqui el analisis del texto de los promotores de una reunion en Valencia proximamente, patrocinada por los Borbon Parma ¿Engañados? con idea de unificar a tradicionalistas, carlistas y extrema derecha cristiana dura. Por desgracia hay gente en el Partido Carlista que participa en eso al mas alto nivel segun parece sin que pase nada. Pues pasa y mucho.
¿Debemos olvidar esto y sustituirlo por el Cuatrilema y que el Señor nos bendiga? Nuestra conciencia nos dice que NO.
FUEROS Y PATRIA. En el carlismo fueros y patria han sido dos conceptos perfectamente ensamblados. España, una de las naciones más antigua del mundo, tuvo que rehacerse en un largo proceso de más de 700 años. Una suma de esfuerzos de lo que los carlistas llamamos “Las Españas” condujeron a la creación de una patria común que fue la más poderosa del siglo XVI.
Aquella unión fue posible porque se respetó la diversidad que nos hacía culturalmente ricos y se potenció la unidad que nos hacía políticamente fuertes. El esfuerzo realizado desde el siglo XVIII por gobiernos centralistas que confundieron unidad con uniformidad y la venta de libertades abstractas, intentaron presentar a los fueros como unos privilegios anacrónicos. Se olvidó que los fueros eran derechos específicos de grupos humanos, exigibles jurídicamente frente a cualquier autoridad y protección ante el abuso de poder. Fue precisamente la eliminación de los fueros y derechos de la mayor parte de las comunidades, muchas veces como castigo de vencedores contra vencidos, lo que al final dejó sin sus fueros a la mayor parte de las Españas y condujo a la fácil argumentación de ¿Por qué alguna comunidad tiene fueros si las demás no los tienen?. En los últimos tiempos en el mundo y en España se ha revitalizado con otros nombres el sentido de los fueros. La propia invención de las autonomías ha intentado ser un reconocimiento “del ser y las peculiaridades de cada región”, pero se ha hecho mal, se ha hecho desde arriba según el interés de los partidos y el peso de los votos.
Aqui cabria objetar que el modelo Arquetipico de la Arcadia Feliz carlista, a imitacion o quiza antecesora de otras arcadias nacionalistas de Madrid y periferia, no se lo cree hoy nadie con sentido comun. Pero como descripcion bonita vale. Tambien la cuestion foral, hoy plasmada en el derecho a decidir y la autodeterminacion, que mira por donde, tal tesis de los pobrecitos carlistas, no olvidemos anteriores a cualquier nacionalismo, torpedea nada menos que el futuro de la Gran Europa, sometedora al estilo napoleonico de peculiaridad geografia etnica o social. Seguimos siendo subversivos, afortunadamente. No estamos muertos.
Los fueros se configuraron desde abajo y fueron garantía de libertades concretas, por eso las dictaduras nunca los toleraron. El carlismo siempre predicó ese sencillo y eficaz principio que llamamos de subsidiaridad: “Que ningún ente superior haga lo que puede hacer uno inferior”. Que cada cual en un mismo edificio tenga su piso pero que seamos conscientes de que tenemos una escalera, un ascensor, una fachada y en definitiva una casa común que es España. Algunos han definido el fuero como “el derecho a ser y el respeto a lo que los demás son”, así nos lo ensañaron a los carlistas y así aprendimos a amar a una patria común en la que todos los hijos eran distintos e iguales.
Si pero lo de la patria comun en ocasiones chirria cuando la llamada patria resulta ser una mala madre, desde 1812 por lo menos y antes. Catalanes y aragoneses supieron bien lo que entendian los Gobiernos por la madre patria... Es totalmente logico que antes que la madre patria haya otras patrias intermedias y con el devenir de los tiempos tales pequeñas patrias del corazon resultaron convertirse en verdaderas madres, mas cercanas y agradecidas, a las que la celosa reina de Blanca Nieves iberica no estaba dipuesta a admitir y por eso ha amenazado, y en ocasion puesto en practica, lo de cañonear, ajusticiar y hacer todo lo trampeable en este mundo para mantener su a veces odiada maternidad. Es por eso mismo que las comunidades sociales mayores de edad tienen derechos por encima de constituciones coaccionadoras que pretenden ser inmutables como las Tablas de la Ley. Nosotros los carlistas no tenemos ningun problema con las madres padrias. Esos problemas los tienen otros.
Y el REY. Carlos VII decía que: “Si un país es pobre vivan lo primero pobremente sus ministros”. Nuestros reyes no vivieron ricos, tuvieron los mismos exilios que sus soldados, pudieron llevar una vida fácil solo con ceder y no lo hicieron, quisieron ser reyes de todos y no liderar una facción. Su legitimidad no la obtuvieron de un golpe de estado o de la designación de un dictador, sino de su origen y ejercicio. El pueblo fue su valedor y ellos los valedores del pueblo. Hoy tenemos la posibilidad de demandarla y de tenerla en la persona de D. Carlos Javier.
Nos van a perdonar que opinemos que cuando uno tiene en su palacio de Loredan Tizianos y Tiepolos pues no es uno tan pobre como aseguran hoy los fieles que no leen historia, pero en fin... Al pobre Don Jaime III tan encomiable por otras razones le gustaba cabalgar por las miles de hectareas de sus posesiones y la malvada Doña Bertha, perfido personaje de culebron de los que hacia Candida Losada, ni se sabe si robo a la Casa Real mas que lo que administra Barcenas... O sea, que las cosas en su sitio, majos. Y un respeto por la verdad, ideologias aparte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario