3 mar 2022

La coherencia de Javier Cubero de Vicente da lecciones a la Asociación 16 de Abril en el campu de las Españas. ¿Quo vadis?

 Este texto publicado en su día por Javier Cubero de Vicente se da de hocicos con la honestísima actuación de la Asociación 16 de Abril homenajeándole muy justamente. Ver el comentario aparecido hoy. Y el baranda fundador de la A16 a ver si se aclara siquiera con el MSDOS cuando le salga su otra personalidad en el Partido Carlista. A lo mejor ha leido a Stevenson Mr. Jeckyll y Mr. Hyde, la duda es cual y en qué momento o si la garrota de la versión francesa de la peli está presente en ambas personalidades. A mi me gusto mucho "El diablo de la botella" en que se va rebajando el precio y el último se la lleva al Infierno. O la reciente versión británica de los ladrones de cadáveres de Edimburgo que es una delicia. Eso de robar cadáveres no solo es escocés ¿Quo vadis Javier Cubero y Santa Compaña adherida? Hay que leer los comentarios al final.

Caradeplata

Nota:Curioso que en algunos sitios la foto en cuestión está cortada hasta hacer desaparecer al Borbón Parma. Será casualidad.

 CONFEDERACION, SOCIALISMO, AUTOGESTION

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Excelente artículo de Javier Cubero de Vicente: Tradición Viva y el acto de Montejurra

Publicado 9:33 PM - Mar 02, 2022
Carlismo libre de ataduras
Javier-Cubero-de-Vicente-y-Carlos-Javier-Borbón.jpg (75.32KiB)
http://eka.partidocarlista.org/tradicion-viva-y-el-acto-de-montejurra/


Un blog llamado «Tradición Viva», afín a determinados sectores de la ultraderecha, publicó un extraño y confuso escrito con motivo de la visita de Carlos Javier de Borbón-Parma al via crucis de Montejurra.

Curiosamente en ningún lugar de este escrito se hacía referencia alguna al Partido Carlista, cuyo Comité en Navarra es quien precisamente organiza anualmente todos los actos de Montejurra. Además, en dicho escrito se afirmaba que Carlos Javier de Borbón-Parma estuvo rodeado «no de afiliados a un partido, sino de carlistas de diversas obediencias».

Lo cierto es que Carlos Javier de Borbón-Parma estuvo acompañado en todo el via crucis por Ramón Muruzabal, militante del Partido Carlista, que es la persona en la cual el Comité del Partido Carlista de Navarra delega la organización de dicho acto. Además, durante la misa de la gruta del Cristo negro, Carlos Javier de Borbón-Parma se situó al lado de Jesús María Aragón Samanes, secretario general federal del Partido Carlista. Una actitud coherente con la trayectoria de Carlos Javier de Borbón-Parma, así como con el comunicado que emitió con motivo del XIV Congreso Federal del Partido Carlista, reconociendo a esta organización política como «la voz de nuestra lucha, ya casi bicentenaria, por las libertades».

Este escrito de «Tradición Viva», aparentemente sin sentido alguno, no constituye una anécdota aislada, sino que se relaciona con otros hechos igualmente extraños. Por un lado, en el via crucis de este año, desembarcaron algunos militantes de la extrema derecha, fácilmente reconocibles por sus uniformes paramilitares. Por otro, varios de estos militantes, “infiltrados” recientemente en cierta Asociación monárquica, han manifestado a lo largo y ancho de las diversas redes sociales que quien organiza los actos de Montejurra no es el Partido Carlista sino esa Asociación.

Posteriormente en la web federal del Partido Carlista se publicó un escrito de respuesta cuyo contenido no comparto totalmente, pero que no anda desencaminado del todo, pues es evidente que hay en marcha una Operación Reconquista 2.0 con el fin de desplazar al Partido Carlista del espacio simbólico de Montejurra.

Que desde la ultraderecha se aspire a lograr, de momento «pacíficamente», lo que en 1976 no consiguieron mediante la violencia terrorista, no es algo que nos sorprenda mucho en el Partido Carlista. Pero el silencio y la ambigüedad en que últimamente se están moviendo algunos directivos de cierta Asociación, en cambio, sí que constituye una novedad que no puede pasar desapercibida. Especialmente cuando en el entorno de esa Asociación, cuyos fines en principio no eran políticos ni ideológicos, a veces se escuchan planteamientos “pintorescos” acerca de diluir tanto al Partido Carlista como a una organización política ultraderechista en una nueva plataforma que se denominaría «Pueblo Carlista», o de desmantelar el Estado de Bienestar Social (la educación y la sanidad públicas) para ir hacia el modelo liberal anglosajón del Estado Asistencial, donde no existe ninguna noción de justicia social redistributiva sino solamente caridad paternalista…

Que no olvide nunca nadie que el Partido Carlista sigue, y seguirá, fiel al legado de Don Javier de Borbón-Parma, reivindicando «un planteamiento de socialismo plural y autogestión global» como decía nuestro Viejo Rey en su última declaración doctrinal de enero de 1977. Y que la única autoridad que determina la línea política e ideológica del Partido Carlista es su Congreso Federal, la única asamblea legítima del Pueblo Carlista organizado políticamente como tal

Publicado 12:07 PM - Mar 03, 2022
Miguel Sáinz
Cómo es posible que Javier Cubero critique abiertamente de esa forma a una asociación de la que recibe un diploma y participa activamente en sus actos como ha quedado acreditado.

Menuda empanada mental.
 
 Carlos Pérez dice:

Se confirma lo escrito por Javier Cubero de Vicente en su artículo.
Carlos Javier, entrevistado en un medio ultra y la entrevista publicada en el medio también ultra llamado Tradición Viva: https://www.tradicionviva.es/2022/02/08/entrevista-a-don-carlos-javier-de-borbon-parma/

Carlos Javier con el discurso de todos los “carlistas” en unión:

«Tanto la Real Orden de la Legitimidad Proscrita como la Asociación 16 de Abril, con las que estoy en contacto permanente, son instrumentos al servicio de los carlistas, sean quienes sean y vengan de donde vengan, para facilitar esa comunicación entre los carlistas y conmigo mismo». (sic)

Javier Cubero lo explica muy bien y lo deja todo meridianamente claro.

Antonio Cervera dice:

No se entiende que Javier Cubero critique a la asociación 16 de abril de esa forma y luego asista a uno de sus actos a recibir uno de sus diplomas acreditativos.
Su comportamiento, cuando menos, es un poco raro y contradictorio.


1 mar 2022

Noticia (para los que amordazan)

 Lo advierto muy en serio:

podéis

amordazar mi pluma,

retirarme el papel, vaciar la tinta

que empuja el corazón a las cuartillas,

quitarme las palabras,

multiplicar las moscas que ha diario

me zumban en los oídos,

alzar los altavoces,

proyectar

el mismo noticiario ya sabido.

Y, sin embargo,

en este mismo instante,

cuando la voz del locutor anuncia

que Gento se desmarca;

que Ordóñez cita al toro con la izquierda;

que el público recibe con aplausos

al salvador de España

en su gira triunfal

por el su Reino;

que las rosas florecen más hermosas que nunca…

en este mismo instante

en Almería

por enésima vez esta semana

un niño acaba de morir hambriento.

 

Carlos Alvarez.

"Pero la sangre sigue siendo roja" (Ha muerto un poeta, Carlos Alvarez q.e.p.d.)


 Ha muerto un poeta

https://librujula.publico.es/ha-muerto-un-poeta-carlos-alvarez/ 

(Texto de Enrique Villagrasa)

 El poeta Carlos Álvarez (Jerez de la Frontera, Cádiz, 1933-2022) ha desencarnado. Era de familia republicana y su padre, capitán de la guardia de asalto, fue fusilado en julio de 1936 en Sevilla, unos días después de estallar la Guerra Civil, por mantenerse fiel a la República, cuando el poeta contaba unos pocos años. Unos años más tarde, en 1941, la familia Álvarez marchará a Madrid con la clara intención de pasar más desapercibida ante el acoso franquista. A partir de los años 50 y habiendo ingresado en el Partido Comunista, en 1958 fue encarcelado en la prisión de Carabanchel por su oposición al régimen de Franco. Allí pudo escribir poesía que más tarde se publicará en el extranjero. Esto fue así, pero hay más, pues: “Cuando voy en el metro, muchas veces,/ me esfuerzo en estudiar en la mirada/ de los que me rodean lo que quieren/ decirme con sus ojos abatidos”.

 Su obra poética es una de las más destacadas para aquellos que nacimos en los 50 del siglo pasado, a pesar de que sus libros fueron publicándose con cuenta gotas, había poca tolerancia y no querían que fueran leídos este ni otros poetas. De hecho su primer libro se publicó en 1963 en una traducción al danés, Escrito en las paredes, en Dinamarca, mientras él estaba encarcelado por razones políticas (reinaba la dictadura franquista). Y el primer libro en lengua española, Noticias del más acá, fue publicado en París, en 1964. Así pues, la poesía de Carlos Álvarez ha sido siempre una extrañeza en el paisaje editorial de este país de ellos, aun hoy, a mi pesar. Su poesía como protesta cívica y disconformidad con las circunstancias fueron singulares en la poesía española que se publicaba entonces. Este poeta jerezano siempre se reafirmó en su discurso de protesta política, con una poesía neoclásica. Y esta apuesta poética sigue siendo hoy más necesaria que nunca, a la vista de lo que leemos en los periódicos y redes sociales, vemos en la televisión o escuchamos en la radio: “La del no es una táctica sencilla,/ según la convicción con que se entrega/ tu impulso a lo que inicia: si se llega/ con nervio vacilante, (…)”.

 

En edición de José Luis Esparcia, la editorial Adeshoras publicó en 2016 en dos volúmenes la obra poética completa, con el significativo título: Los sueños, el amor, las intenciones (volumen I, con 496 páginas y el volumen II, con 518 páginas, el cual incluye un prólogo de Aurora de Albornoz) y de ella Esparcia señala que el poeta “aprovecha su conocimiento del ritmo y de la propia realidad para demostrar que las cosas, también las poetizadas, son como son y no como otros tienen la intención que sean. Quizás por eso termina su obra con luminoso e indiscutible verso, que tanto dice de sus intenciones y de sus esperanzas: Pero la sangre sigue siendo roja”.

A mí me sigue gustando mucho Reflejos en el Iowa River (Orígenes, 1984), por lo de antiimperialista, tal vez, aunque la crítica literaria y poeta Albornoz, mejor y más conocedora de la obra de Álvarez que yo, escriba que “La campana y el martillo… es, sin duda, una llamada a la imaginación del lector desde el mundo de imaginación creado por el poeta. Pero –ya lo decía al comenzar- el <<libro-juego>> es, ante todo un testimonio íntimo. Y, desde luego, una muestra de que lo testimonial y lo imaginativo no son términos contradictorios. De sobra sé que todo juicio de valor es arbitrario, por subjetivo; mas no puedo renunciar a aventurar que en este libro y en uno que, en cierta forma se le asemeja –Aullido de licántropo– está el mejor Carlos Álvarez”.

El poeta tenía claro que la poesía no sirve para cambiar el mundo; pero sí puede ser un instrumento para crear en una persona (lectora, añado) la necesidad de cambiar el mundo. ¡Leamos su obra y agradezcamos a Adeshoras la publicación de la poesía de Carlos Álvarez! ¡Este y no otro será nuestra mejor homenaje: leer su poesía! ¡Descansa en paz, poeta!