26 ene 2017

El Objetivo Carlista

EL OBJETIVO CARLISTA


A las alturas del siglo XXI que estamos no es ninguna tontería el aclarar los verdaderos objetivos carlistas, o sea, del Carlismo, del Partido Carlista, o incluso de las denominaciones inventadas o resurrectas para salvar el obstáculo del enfrentamiento directo con lo que el Partido Carlista ha ido diciendo a lo largo de muchos Congresos y que en esencia conocemos todos.

¿El objetivo del Partido Carlista representante legítimo del Carlismo y de los carlistas es sustituir una monarquía de cierto tinte por otra, la carlista (omitamos las objeciones lógicas y conocidas a esta cuestión)? Rotundamente no.

Si fuera así el esfuerzo de desarrollo ideo0logico de muchas décadas habría sido absolutamente inútil porque se trataría de cambiar unas personas por otras, el Partido Carlista ni puede hacerlo ni lo haría si pudiera, el XIX y sus circunstancias quedaron atrás y lo que nos ha quedado es otras cosas mas importantes.

Porque el Partido Carlista tiene una ideología hoy socialista y autogestionaria ¿Es que se pretendería teñir ideológicamente un sistema monárquico con unos matices, los nuestros, que despreciarían absolutamente a los demás? Aparte de las contradicciones racionales que eso supone y que todos conocemos. Una monarquía teñida de carlismo seria una especie de tiranía sobre el resto de las ideologías en las Españas. Oiga, no hemos hecho tantas guerras para convertirnos en aquello que combatimos. Los irrazonables dirán que si pero eso es pan para hoy y graves crisis para mañana y a eso no jugamos.

Porque además el Partido Carlista tiene unas ideas y unos programas desarrollados o no, discutibles por supuesto, pero que en modo alguno pueden inspirar monarquía alguna y si no véase la actual crisis de las monarquías liberales y la actitud del actual “totem” del Jefe del Estado, Felipe de Borbón, heredero a través de padre de una dictadura aliada de Hitler y Mussolini, protegida por los Estados Unidos y así nos metieron la monarquía actual en la Constitución del 78. Y recientemente se ha descubierto que Adolfo Suárez no sometió tal cosa a referéndum no fuese que saliera el rechazo.... ¿Se pretende inaugurar la época del fracaso de las monarquías “antiliberales”? Pues tampoco vamos por ahí sencillamente porque es absurdo. Y ello para no hablar de las reveladoras palabras de Carlos Hugo de Borbon Parma, recordadas en el XIV Congreso y no desmentidas por nadie ni en su día ni después, en que descalificaba la monarquía como objetivo carlista al considerarlo una cuestión superada por el tiempo.

Somos un partido socialista, el carlista, con un socialismo determinado y por supuesto que en general es posiitivo que partidos socialistas gobiernen en las Españas con sus programas y consiguiendo cosas parciales. Pero el socialismo y las aspiraciones carlistas son algo mas-. No se descarta lo expuesto pero a lo que hay que aspirar dentro de la máxima libertad es a cambiar la sociedad libremente y no es redundancia. No podemos aspirar a una sociedad socialista en la que los no socialistas sean excluidos porque también forman parte de ella. Ese ha sido siempre el error del socialismo totalitario que por supuesto jamás hemos compartido.

Por eso el objetivo carlista es la práctica del socialismo, la práctica del carlismo socialista en lo social promovido desde el Partido Carlista a la par que sus objetivos políticos parlamentarios en tanto que tal partido. Si no hay y no existe esa práctica no se va a ninguna parte.

Caradeplata.

1 comentario:

Unknown dijo...

¿Pero existe el Partido Carlista? ¿Eso es la cuestión autentica del carlismo?